¿Cómo llegar?
Está situado en el Polígono Industrial Comarcal de Castejón, construido entre el pueblo y el río Ebro. El Castillo se sitúa sobre el río, en la zona noreste del polígono.
Situación y emplazamiento
Este asentamiento se sitúa aguas abajo de la desembocadura del Alhama, en la margen derecha del río. Ocupa un cerro, colgado sobre este río, situado a una altura de unos 292m sobre el nivel del mar (unos 40m sobre el cauce del río).
Trabajos de investigación
El Cerro del Castillo fue objeto de distintas campañas de excavación en los años 40 y 60 del pasado siglo, bajo la dirección de Blas Taracena y Jorge de Navascues.
Características del asentamiento
Se calcula que tenía una superficie mínima de 2,7Ha, ya que una parte, por su zona noreste, ha sido destruida por la erosión del río Ebro. Este poblado celtibérico pudo jerarquizar el poblamiento de esta zona, por la importancia que tiene al ser el punto de arranque de una de las vías de comunicación, que desde el Ebro, siguiendo el curso del Alhama, con apoyo en Contrebia Leukade (Aguilar del Río Alhama), comunica con la Meseta y la ciudad de Numancia.
El sistema defensivo
Se diferencia un doble cerco murado, un muro que rodeaba la acrópolis, en la parte alta del cerro, y una segunda muralla para proteger el caserío, con un fosopor delante, que se extendía por la ladera sur-oeste, uniéndose a la muralla superior. La parte del muro de ambos recintos, que daba al río, ha desaparecido por la acción erosiva del Ebro.
Aspectos sociopolíticos y cronología
Este poblado celtibérico pudo haber perdurado hasta el s. III a. C. y quizás jugo un papel central en la jerarquización del poblamiento del área, en una zona donde arranca una de las vías de comunicación del valle del Ebro con la Meseta, como es el valle del río Alhama, que desde el valle del Ebro, pasando por Contrebia Leukade, comunicaba con la Meseta en alto Duero, teniendo como referencia la ciudad de Numancia.
La necrópolis (no es visitable)
En el año1.999 con motivo de la construcción de una central térmica, la empresa Iberdrola encargó a la empresa arqueológica TRAMA S.L. la realización de los trabajos de impacto arqueológico sobre los terrenos afectados, dando como resultado el hallazgo de la necrópolis celtibérica asociada al poblado, que fue excavada en los años siguientes, 2.000 y 2.002.
La variedad de sus enterramientos tumulares, así como la singularidad de sus ajuares vienen a ampliar la información sobre el ritual funerario, la adscripción étnica de este territorio y sus relaciones con otros zonas, a través de una vía tan significativa de comunicación entre el Mediterráneo y el interior peninsular como es el Ebro.
- Situación y emplazamiento:
La necrópolis se ubica en una ligera loma, a unos 450m, al suroeste del poblado celtibérico.
- Las estructuras funerarias:
Empleo del túmulo de piedras (grandes cantos rodados) o adobes (anillos y cistas). En algunos casos estos túmulos que protegen la cámara funeraria (urnas de cerámica, metal o cistas de adobe) adoptan la forma de uno o dos anillos exteriores, a veces señalizados en superficie mediante estelas hincadas junto al anillo exterior.
- Los ajuares:
Los objetos hallados en las tumbas muestran un gran dominio del trabajo de metal en bronce y también en hierro, que se refleja en los adornos, realizados básicamente en bronce y los útiles y armamento confeccionados en hierro.
La presencia de armas (lanza, soliferrea, espadas), así como bocados de caballo, reflejan la importancia del caballo y el guerrero en este contexto social. Estas diferencias sociales quedan realzadas con la presencia de así objetos de importación tanto de materiales procedentes de la península (urnas de orejetas y una falcata ibérica), como de productos exóticos de procedencia del mediterráneo oriental (escarabeos egipcios), que llegarían a través de los pueblos colonizadores (fenicios).
- Jerarquización:
Las diferencias de tipo y forma de las tumbas, la existencia de enterramientos pequeños, asociados a ajuares y depósitos sencillos, que contrastan con otros de gran tamaño y compleja arquitectura, relacionados con ricos y complejos ajuares, se interpretan como reflejo de una jerarquía o distinción social dentro del grupo, reflejado también en la asociación de armas (lanza, soliferrea, espadas, una falcata ibérica) y bocados de caballo, que constatan como el caballo y el guerrero eran signo de distinción de estatus y dominio social.
- Cronología:
Aunque aún falta el estudio en profundidad de esta necrópolis y se desconocen los resultados del análisis de C-14, el estudio de los materiales aporta una cronología del siglo V-IV a.C., que quizás pudiera llegar hasta el III a.C., como parece apuntar el poblado.
Contactos y horario
No está señalizado y el acceso es libre, pero los ajuares hallados en la necrópolis se pueden contemplar en el Museo Municipal de Castejón.